La mina de wolframio del Cerro de San Pedro sigue contaminando con arsénico los acuíferos y el aire en los términos municipales de Guadalix de la Sierra, Colmenar Viejo y Tres Cantos

El autor de este reportaje, Pedro Pozas, con mascarilla junto a los residuos de arsénico. Los escombros de tonos grisáceos que se observan detrás son altamente peligrosos por contacto y por vía respiratoria. (Fotografía: Pedro Pozas).

¿Hasta cuándo vamos a tener este residuo altamente tóxico en las cercanías de nuestras viviendas? ¿Cuándo los políticos van a afrontar seriamente este problema en las puertas de nuestros municipios? Si son ineptos, que dimitan y dejen paso a personas que de verdad se preocupen por los ciudadanos. Las minas de wolframio siguen contaminando nuestros acuíferos y el aire con arsénico. ¿Se pondrán medidas cuando haya una desgracia?

Lo llevo denunciando desde hace varios años en diferentes medios de comunicación sin que los políticos demuestren el más mínimo interés y preocupación por la mina de wolframio abandonada en las faldas del Cerro de San Pedro, término municipal de Guadalix de la Sierra, y que afecta también por su cercanía a Colmenar Viejo y a Tres Cantos; mina que contiene residuos a cielo abierto de arsénico. Una información muy grave que debería haber puesto en marcha de forma urgente los mecanismos para solucionar esta contaminación mortal que puede afectarnos a todos nosotros.

Ante la importancia del hecho y debido a mis propias investigaciones, denuncio una vez más en estas líneas, la ineptitud de los políticos de esta zona norte de Madrid y de la Comunidad de Madrid que conocen perfectamente las ubicaciones de las minas y el peligro que conllevan, por ser el arsénico una sustancia mortal para los seres vivos.

Agujero por donde puede entrar una persona adulta sin ningún tipo de protección ni valla. Al fondo se observan los residuos contaminantes. (Fotografía: Pedro Pozas).

Existen, y me he preocupado de adquirirlos sin ningún esfuerzo, informes científicos que alertan sobre los residuos de arsénico repartidos por la zona norte de Madrid. Uno de ellos en especial, avala y denuncia la contaminación por arsénico en el Cerro de San Pedro debido a los residuos que se encuentran al aire libre en una mina abandonada y que durante la Segunda Guerra Mundial fue explotada para entregar el material extraído a los alemanes, dejando residuos esparcidos sin ningún tipo de control. Este residuo es una fuente aguda de contaminación debido a que al estar en la intemperie y por consiguiente sujeto a la erosión, la liberación de arsénico es continua, contaminando los suelos y los acuíferos. En este caso, el peligro es máximo ya que los residuos y los restos de la mina están junto al Arroyo de Horcajo, totalmente contaminado según los propios científicos en todo su recorrido. El hecho de que este pertenezca a  Guadalix de la Sierra, no justifica los brazos cruzados de los Ayuntamientos de Colmenar Viejo y Tres Cantos, ya que la contaminación y el aire no conocen de municipios.

Es de una irresponsabilidad manifiesta que no se tomen medidas al respecto ni se retiren los residuos que se encuentran amontonados junto a los restos de la instalación de la mina.

¿A qué están esperando los Ayuntamientos de Guadalix de la Sierra, Colmenar Viejo y Tres Cantos para solucionar este grave problema? ¿Qué hace la Comunidad de Madrid al respecto? ¿Están esperando a que un día un niño o varios jóvenes, desconociendo la composición de los escombros, se envenenen y haya muertos? ¿Es que los responsables a quienes pagamos los ciudadanos no son capaces de tomar decisiones y solo lo harán cuando ocurra algo grave? Ya se han encontrado vacas muertas en la zona. ¿Hay que esperar a que se halle un cuerpo sin vida de una persona?

Los informes científicos han sido publicados en la prensa por investigadores de CSIC; incluso ha sido tema en el programa de televisión de Cuarto Milenio dirigido por Iker Jimenez. No entiendo que sea tan difícil tratar este asunto políticamente y tomar las medidas necesarias para proteger a los ciudadanos. Claro, solo se preocupan de los ciudadanos cuando hay elecciones… Al menos eso dan a entender anta la pasividad en sus tomas de decisiones.

Si aún no era suficiente, me he acercado en persona a la mina abandonada y es un desastre y una temeridad lo que he visto. Una indignación elevada al más alto de los rangos y una irresponsabilidad por quienes son responsables de la seguridad ambiental de los ciudadanos. Bien es cierto que la mina está en el término de Guadalix de la Sierra y los responsables políticos de este municipio deberían dimitir por el abandono y la forma tan chapucera en como está rodeada esta mina. Pero la contaminación, como ya he dicho, no tiene líneas imaginarias de municipios y nos afecta a todos.

Desde donde están los residuos, se encuentra el camino de tierra. Se puede apreciar el cercado sin ningún tipo de advertencia. Los árboles de la izquierda se encuentran en el Arroyo de Horcajo (Guadalix de la Sierra). En el centro, está el residuo de arsénico. (Fotografía: Pedro Pozas).

Sí es cierto que la zona posee una valla reciente, pero se encuentra a un metro del montículo de residuos con arsénico y rodea únicamente los residuos, dejando los restos de la mina sin ser vallados para que cualquier persona pueda entrar y deslizarse por los agujeros hasta el mismísimo montículo de residuos peligrosos sin ningún esfuerzo. Además, en ningún sitio hay carteles de PELIGRO que prevengan a las personas que pasen por allí.

Pero no solo está este peligro, existen otros lugares de la zona norte de Madrid cuyas coordenadas geográficas apunto a continuación y que hacen peligrar las vidas de miles de personas por contaminación de arsénico. Los datos están ahí. Los informes se pueden conseguir. El ciudadano, como siempre, tiene la fuerza para cambiar las cosas, y creo que les pagamos muy bien a los políticos que nos representan para que pongan soluciones de forma inmediata  ante una contaminación silenciosa que puede estar matando a la gente. De nosotros depende. Ellos no harán nada si no existe presión ciudadana. Si queremos seguir contaminados, adelante, mantengámonos en silencio, es lo que más les gusta. Claro, hasta que ocurra una desgracia en la mina abandonada y entonces podrán soluciones. ¿Lo vamos a consentir?

Coordenadas de 27 zonas de la Comunidad de Madrid contaminadas por arsénico, debido a la extración de wolframio. Un «legado» de la Segunda Guerra Mundial

Camorchones: N 40º 40 ’50 «W 3º 41′ 30»

Cerro Becerra: N 40º 40 ’04 «W 3º 43′ 10»

Zarzalejo: N 40º 40 ’00’ W 3º 41 ’20 «

Rancajales: N 40º 43 ’50 «W 3º 44′ 00»

Cancho El Escorial: N 40º 43 ’06 «W 3º 43′ 33»

Arroyo Tejada: N 40º 43 ’28 «W 3º 44′ 05»

Las Minas: N 40º 44 ’42 «W 3º 43′ 12»

Dehesa de Moncalvillo: N 40º 42 ’16 «W 3º 43′ 20 ‘»

Cantera Remedios: N 40º 42 ’30 «W 3º 38′ 43»

Cerro Eugenio: N 40º 40 ’55 «W 3º 46′ 30»

Los Chortales: N 40º 41 ’15 «W 3º 40′ 10»

Cerro Pela: N 40º 41 ’40 «W 3º 40′ 33»

Cerro La Navilla: N 40º 43 ’05 «W 3º 40′ 05»

Los Viveros: N 40º 38 ’55 «W 3º 46′ 10»

La estación de tren de Soto: N 40º 43 ’20 «W 3º 47′ 30»

Ferroviarias km 35,5: N 40º 42 ’40 «W 3º 48′ 00»

Ferroviarias km 37,9: N 40º 43 ’30 «W 3º 47′ 20»

Ferroviarias km 39,9: N 40º 44 ’15 «W 3º 46′ 00»

Ferroviarias km 41,5: N 40º 44 ’50 «W 3º 45′ 30»

El Vedado: N 40º 40 ’10 «W 3º 43′ 40»

Río Valdepuercos: N 40º 41 ’10 «W 3º 43′ 20»

La Mata: N 40º 44 ’29 «W 3º 36′ 09»

La Calera: N 40º 45 ’35 «W 3º 41′ 09»

Cancho de Pedrezuela: N 40º 44 ’10 «W 3º 40′ 55»

La Nava: N 40º 46 ’40 «W 3º 45′ 22»

La Pedriza: N 40º 46 ’50 «W 3º 49′ 45»

Verdugal: N 40º 45 ’20 «W 3º 40′ 30»